Una de las preguntas que más comunmente nos hacemos todas cuando tenemos una prenda especial en nuestras manos es: ¿Y ahora cómo la lavo? Pues aquí estamos nosotras para desvelarte esos trucazos que harán que tu ropa Animosa, y especialmente las prendas delicadas, sigan intactas lavado tras lavado. Y sí, se aplican también al resto de tu armario.
Retira todas las decoraciones antes del lavado
Muchas de nuestras prendas contienen todo tipo de decoraciones que pueden dañarse en el proceso de lavado. Pero, justo por eso, pensando su mantenimiento, la gran mayoría son extraíbles. Así que es de vital importancia que recuerdes retirar cadenas, imperdibles, hombreras de abalorios, plumas y todo tipo de decoraciones desmontables antes de introducir tu ropa en la lavadora.
Lava tu ropa del revés
Otro de los trucos por excelencia es darle la vuelta a las prendas antes de lavarlas. Esto es de vital importancia especialemente para camisetas, sudaderas o vestidos con estampaciones, pero también favorecerá que el resto de tu ropa mantenga sus colores más vívidos.
¡Cuidado con la temperatura!
La gran mayoría de nuestra colección textil está elaborada en un algodón de alta calidad, y el algodón es un material especialmente sensible al calor. Si no quieres terminar con toda tu ropa reducida a tamaño bebé te aconsejamos no superar una temperatura de 30º durante el lavado. ¡Aún mejor si la lavas en frío! Eso ayudará a preservar los colores y evitar que la ropa destiña.
Lee atentamente las indicaciones de las etiquetas
Sí, te hablamos de esos simbolitos raros que aparecen en las etiquetas de tela y que te dan un montón de información sobre cómo cuidar cada prenda. No te preocupes si no sabes identificarlos, te mostramos una guía de los más habituales. Pero si aparece alguna que no encuentras, aquí encontrarás la explicación de todas en detalle.
El cómo tendemos nuestra ropa hace la diferencia
Sabemos que las secadoras son muy cómodas, pero también tremendamente perjudiciales para tu ropa. Te lo aseguramos, lo mejor es tenderla, ¡y hacerlo bien! Eso puede hacer una gran diferencia y evitarte tener que planchar luego.
Sacude y estíra bien tu ropa antes de colgarla, y siempre que puedas hazlo colocándola en perchas. Si la tiendes en exteriores y tienes que utilizar pinzas, colócalas siempre en las costuras para no dejar marcas y deformar las prendas: en las axilas en camisetas y vestidos, en la ingle o costuras laterales de los pantalones… Y recuerda evitar dejarlas mucho tiempo al sol para que no pierdan su color.
Si se trata de jerseis o chaquetas de punto, trata de dejarlas a secar sobre una superficie, evitando así que se estiren y deformen por el peso durante el proceso de secado.
Si aún sabiendo todo esto decides seguir utilizando la secadora… Chica, ¡no te juzgamos! Somos mujeres ocupadas y bien que viene esa ayudita. Eso sí, asegurate de consultar que no lo desaconseje la propia etiqueta de la prenda con el símbolo que te indicamos en el apartado anterior.
Guárdala correctamente
Elige perchas que no deformen los hombros de tus vestidos y camisas, y nunca cuelgues tus prendas de punto. Chaquetas y jerseis de punto deben guardarse doblados para evitar que se estropeen.
¡Atenta a las prendas delicadas!
Algunas de las prendas que te puedes encontrar en nuestra Nueva Colección Indestructible utilizan nuevos materiales para conseguir diferentes texturas y acabados. Sabéis que siempre buscamos ofreceros lo mejor, y la caída que conseguimos en los vestidos gracias a estos nuevos tejidos, la personalidad que ofrecen esos pequeños y delicados detalles, realmente hacen la diferencia. Es por eso que merece la pena ofrecerles un trato especial y debemos tratarlos con un poquito más de mimo. Si tu prenda va identificada con esta etiqueta, tómate unos segundos para leerla.
Estos son los que consideramos los puntos más importantes en torno al cuidado de nuestras prendas, pero por supuesto no te olvides de lo más básico: Separar la ropa por colores. O puede que toda tu colada termine hecha un desastre. Además, si los colores son muy vívidos y tienes dudas, te aconsejamos hacer una prueba a parte e introducir la prenda en agua durante unos 15 minutos para ver si destiñe. ¡Mejor prevenir que curar!